viernes, julio 31, 2009

Sigue el dinero: la ofensiva imperial en América Latina se evidencia en dólares


• El Presupuesto de la USAID y el Departamento de Estado aumenta el 12% para el año 2010, con 2,2 mil millones de dólares destinados a América Latina
• 447,7 millones de dólares son para “promover la democracia” en América Latina
• 13 millones de dólares para “promover la democracia” en Venezuela
• 101 millones de dólares para “promover la democracia” en Bolivia
• 3 millones de dólares para un fondo especial para la OEA para “consolidar la democracia representativa en Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Venezuela”
• 20 millones de dólares para la “transición hacia la democracia” en Cuba
• El Presupuesto del Comando Sur aumenta en un 2% para llegar a los 200 millones de dólares para el 2010 más 46 millones de dólares adicionales para mejorar la base militar de Palanquero, Colombia, para el uso estadounidense
No existe duda ninguna sobre la escalada de agresión imperial en América Latina durante los últimos años. Desde el golpe de Estado contra Venezuela en 2002, el secuestro del presidente Aristide de Haití en 2004, las intervenciones en los distintos procesos electorales en la región, la reactivación de la cuarta flota de la armada estadounidense en 2008, los intentos de generar un conflicto regional entre Colombia, Venezuela y Ecuador, el separatismo en Bolivia, y hasta el golpe de Estado contra Honduras en 2009 y el alarmante aumento en presencia militar de Estados Unidos en la región – todo evidencia que el imperio está a la ofensiva de nuevo en América Latina. Pero más allá de la manifestación visible de esta agresión, que busca neutralizar los procesos de cambio revolucionario en la región, existen pruebas contundentes –innegables- de que hoy en día, Washington está apuntando hacia el Sur con su gran poder militar, diplomático, económico y comunicacional.

Sigue el dinero y encontrarás la verdad

La evidencia sobre el aumento en financiamiento durante los últimos años de las agencias de Washington a los sectores de la oposición en Venezuela, Bolivia, Ecuador y otros países que están construyendo modelos alternativos al capitalismo estadounidense, se han presentado, se han denunciado y no se ha desmentido. Que existe una tendencia de financiar y apoyar a la desestabilización regional por parte del imperio, desde la llegada de la Revolución Bolivariana hace diez años, es un hecho. Pero no tenemos que examinar la evidencia desde los diez años hasta hoy, podemos simplemente mirar de hoy al futuro para comprobar que Washington financia no solamente a la desestabilización regional, sino que también está aumentando esa financiación e intensificando sus planes militares para los próximos meses.

La USAID, Agencia de Desestabilización Internacional

La agencia que comenzó como el brazo financiero del Departamento de Estado en el año 1962 para atender a los asuntos “humanitarios”, se ha convertido durante el siglo XXI en uno de los actores principales de la contrainsurgencia bajo la nueva doctrina de Guerra Irregular de Washington. A principios del año 2009 fue firmada ésta doctrina por el recién llegado presidente de Estados Unidos, Barack Obama, como parte de su nueva política de “smart power”, el poder inteligente, una política que emplea el uso del poder militar junto con la diplomacia, la cultura, la comunicación, el poder económico y la política. Hay dos grandes puntos de diferencia entre la Guerra Irregular y la Guerra Tradicional: el objetivo y la táctica. La Guerra Tradicional ve como objetivo la derrota de las fuerzas armadas del adversario, y su táctica principal es el uso del poder militar en su forma más tradicional – el combate y el bombardeo. La Guerra Irregular tiene como objetivo el control sobre la población civil y la neutralización del estado, y su táctica principal es la contrainsurgencia, que es uso de técnicas indirectas y asimétricas, como la subversión, la infiltración, las operaciones psicológicas, la penetración cultural y la decepción militar (el intento de engañar a las fuerzas armadas del adversario para que reaccionen a amenazas que no existen en la realidad, así distrayendo y desgastando sus capacidades y recursos).
Durante el siglo XXI, la USAID ha desarrollado divisiones dentro de la agencia que funcionan juntos con el Pentágono, como las oficinas de Gerencia de Conflictos, Transición y Reconstrucción, Democracia y Gobernabilidad, e Iniciativas hacia una Transición, que están reorientando su trabajo hacia los esfuerzos de contrainsurgencia. Así, la USAID se ha convertido en el actor principal financiero de la desestabilización y la penetración en la “sociedad civil” en países estratégicamente importantes para los intereses estadounidenses.
En el caso de América Latina, las cifras de inversión financiera de la USAID en los grupos políticos y en la “promoción de la democracia”, que se traduce en términos reales como una invasión silenciosa, son abrumadoras. A través de una Oficina para las iniciativas hacia una transición (OTI, por sus siglas en inglés), que fue establecida en Venezuela en agosto 2002, la USAID ha invertido 15 millones de dólares en el conflicto político en Venezuela solamente durante el último año y medio. Y tiene previsto una financiación de 13 millones de dólares para el año 2010, un incremento notable del año pasado. Estos millones de dólares alimentan el conflicto en el país, manteniendo vivo a diferentes grupos de oposición y ayudando crear nuevas organizaciones para seguir con sus planes desestabilizadores. Los beneficiarios son conocidos: Súmate, Sinergia, CEDICE, Red de los Barrios, Primero Justicia, Consorcio Justicia, Universidad Metropolitana, Liderazgo y Visión, CESAP, y cientos de otros grupos políticos, ONG y partidos políticos que viven del dinero y el apoyo que vienen desde Washington.
Por toda América Latina va aumentando el presupuesto de la USAID y el Departamento de Estado (DOS) para promover la agenda y los intereses de Washington. Vemos algunos ejemplos:

Bolivia: Presupuesto de la USAID/DOS para 2009 = 86 millones de dólares; Presupuesto para el 2010 = 101 millones de dólares;

Ecuador: Presupuesto de la USAID/DOS para 2009 = 35 millones de dólares; Presupuesto para 2010 = 38 millones de dólares;

Honduras: Presupuesto de la USAID/DOS para 2009 = 43 millones de dólares; Presupuesto para el 2010 = 68 millones de dólares;

Nicaragua: Presupuesto de la USAID/DOS para 2009 = 27 millones de dólares; Presupuesto para 2010 = 65 millones de dólares.

También hay un fondo especial en 2010 de 3 millones de dólares para el Fondo para Fortalecer la Democracia de la Organización de Estados Americanos (OEA), para “defender y consolidar la democracia representativa en Nicaragua, Venezuela, Ecuador y Bolivia…” No es casualidad que el fondo va dirigido a promover la “democracia representativa” en cuatro países donde se están implementando un modelo de democracia participativa. Tampoco es coincidencia que son países del ALBA, y que Honduras no está incluida en la lista, ya que con el golpe de Estado contra el Presidente Zelaya se daba por resuelto la “amenaza” de la democracia participativa en ese país.
Adicionalmente, el presupuesto del Departamento de Estado para el año 2010 incluye 447,7 millones de dólares para “mejorar la seguridad, fortalecer las instituciones democráticas, promover la prosperidad e invertir en la gente” en América Latina. Dentro de ese monto hay 200,7 millones de dólares destinados a Colombia para “consolidar los logros del gobierno de Colombia en la lucha contra los grupos ilegales y armados y el narcotráfico”, y 20 millones de dólares para “promover la democracia” en Cuba, “ayudar a los presos políticos y otras víctimas de represión” y “promover la competición política dentro de Cuba. Ese presupuesto incluye también a 6 millones de dólares para “fortalecer y promover la sociedad civil, la participación ciudadana, los medios independientes, las organizaciones de derechos humanos y los partidos políticos democráticos” en Venezuela, y un fondo de 91.1 millones de dólares para el uso discrecional del Presidente Obama para “promover los intereses” de Estados Unidos en la región. El año pasado, éste fondo sólo llegaba a 23 millones de dólares.
En total, son 2,2 mil millones de dólares que utilizarán el Departamento de Estado y la USAID en América Latina durante el año 2010. Este es un aumento del 12% del presupuesto del año 2009, último año de la administración de George W. Bush, que apartaba unos 1,9 mil millones de dólares para América Latina. Todas estas grandes cifras evidencian el énfasis que pone el gobierno de Obama en su trabajo político en América Latina y la intención de retomar la dominación e influencia de Estados Unidos en el hemisferio.

El Comando Sur se potencia de nuevo

Pero no solamente es el Departamento de Estado y la USAID que han recibido un salto financiero para intensificar sus operaciones en América Latina, sino que la Guerra Irregular y el “smart power” (poder inteligente) de la administración de Obama también emplean el uso del poder y fuerza militar. En este sentido, el presupuesto que ha solicitado Obama para el Pentágono para el año 2010, sobrepasa el último presupuesto de Bush – considerado en su momento el más alto de la historia – por casi 25 mil millones de dólares. Son más de 533 mil millones de dólares solicitados y aprobados por el gobierno de Obama para sus operaciones en materia de defensa para el año que viene (el presupuesto del Pentágono del año pasado fue 515.4 mil millones de dólares). Esta cifra no incluye a los 80 mil millones de dólares adicionales para las guerras en Iraq y Afganistán, y tampoco incluye al presupuesto de la comunidad de inteligencia de Washington, lo cual se mantiene en secreto.
Pero dentro de esta inmensa cifra – sobre la cual las Naciones Unidas han dicho que con sólo una cuarta parte del presupuesto de defensa de Estados Unidos de un año, se podría dar comida, casa, atención médica y educación a todos los niños y las niñas del planeta – hay aportes interesantes para América Latina. El aumento del Comando Sur para 2010 es de 2% para llegar a 200 millones de dólares, más 46 millones de dólares adicionales para mejorar las instalaciones de la base militar en Palanquero, Colombia. También, el presupuesto del Pentágono indica que una de las prioridades presupuestarias es la implementación de la Doctrina de Guerra Irregular, incluyendo en la zona de operaciones del Comando Sur. Específicamente destaca que, “El presupuesto del 2010 para el Comando Sur completará su transformación y reorganización para ser una organización “inter-agencias”, que posiciona a Estados Unidos como el socio más atractivo en las Américas. El Comando está marcando el estándar para asegurar que la organización opera de manera eficaz en un ambiente del siglo XXI, y que promueve la democracia, los derechos y las libertades individuales, el libre comercio, la diplomacia, el desarrollo y la seguridad para las Américas.” En esencia, el “smart power” como táctica de la Guerra Irregular, que emplea el uso del poder militar.

La Privatización de la Guerra en Colombia

Y adicional a estas cifras multimillonarias están los más de 550 millones de dólares destinados anualmente para el Plan Colombia. Casi la mitad de esos millones llegan a manos de contratistas privados que operan como mercenarios de un ejército privado dentro del país suramericano. Algunos datos de un documento desclasificado del Departamento de Estado del año 2007, revelan las operaciones, nombres y cantidades otorgadas a 31 contratistas estadounidenses trabajando en Colombia. La información evidencia que la Policía Nacional de Colombia, las fuerzas armadas colombianas y hasta los cuerpos de inteligencia son manejados por contratistas privadas de Estados Unidos, que son pagadas por el Departamento de Estado y el Pentágono.

Aquí hay algunos de ellos:

• 52.868.553 dólares para Lockheed Martin, gran empresa del complejo militar industrial, encargada de suministrar apoyo logístico y recursos humanos para ayudar a la Policía Nacional de Colombia.
• 164.260.877 dólares para DynCorp International, para la provisión de pilotos, técnicos y apoyo logístico para el Ejército colombiano y el programa de erradicación aérea de la Policía Nacional de Colombia.
• 7.875.000 dólares para ARINC, Inc., para el apoyo logístico, ingenieros, mantenimiento de sensores y formación a la Policía Nacional de Colombia en el uso de aviones C-26 equipados con equipos de monitoreo, espionaje y colección de señales.
• 20.953.000 dólares para ARINC, Inc., para formar personal y suministrar apoyo logístico para los aviones que utilizarán en el Programa Colombiano de Puentes Aéreos y la supervisión aérea de las fuerzas estadounidenses.
• 5.000.000 dólares para Oakley Networks para suministrar un software de monitoreo de Internet y para ayudar los programas conducidos por la Policía Nacional de Colombia de monitoreo en Internet.
• 6.533.502 dólares para ITT para operar y mantener un Sistema de Radares Hemisféricos en Colombia. También suministrar los recursos humanos para operar cinco radares en Colombia y un nodo de comunicación satelital en Bogotá.
• 2.345.442 dólares para Lockheed Martin para operar un sistema de inteligencia y espionaje aérea, que incluye a la conducción de misiones de inteligencia comunicacional y la colección de sensores e imágenes.
• 3.394.768 dólares para el Grupo Rendon (a través de Lockheed Martin) para dar talleres de formación sobre operaciones psicológicas en apoyo al Plan Colombia. Esto incluye al uso de una plataforma del programa Echelon de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos, que es el programa de espionaje y comunicaciones más grande del mundo.
En una próxima entrega, detallaré más sobre los contratistas privadas operando desde Colombia, y también, divulgaré una lista creciente de organizaciones políticas en América Latina financiadas por la National Endowment for Democracy (NED) para promover la agenda imperial. El dinero revela todo, y de descubrirlo y denunciarlo, destapamos la conspiración.

Eva Golinger

Lanzagranadas suecas a Honduras y Venezuela y una base naval construida en Colombia por los suecos que ahora será de los Estados Unidos


Mi amigo y excelente periodista Jorge Capelán me envió desde Suecia unos archivos sobre Honduras. En la tabla 8, que trata del equipamiento militar de las FF.AA. hondureñas, podemos observar que esa institución había adquirido y poseía el 1993 de 120 lanzagranadas modelo Carl Gustav de la industria militar BOFORS, Suecia. La fuente es tomada en ‘Based on information from The Military Balance, 1993- 1994, London, 1993, 180; and Jane's Fighting Ships, 1993- 94, Alexandria, Virginia, 1993, 442.’ [1].
Esta empresa privada, hoy en la mano de la familia Wallenberg, prácticamente dueño de Suecia con empresas transnacionales como Ericsson, SKF, SAAB, Scania, Electrolux, etcétera en su poder, estuvo involucrada en un tremendo escándalo en la década '80 con ventas de armas pesadas como cañones Haubits a India a un costo, si no me falla la memoria, de 8,5 mil millones de dólares. Fue contra toda la legislación sueca sobre exportación de productos de armas a países en conflictos armados. Pues ese año y hasta hoy, India tiene un conflicto no resuelto con Pakistán.
Ahora se han vuelto palomitas, tanto el gobierno de derecha sueco como la empresa y se indignan porque, supuestamente, Venezuela (y Chávez?) ha entregado tres lanzagranadas a las FARC, ojala que fuera verdad pero no lo creo.
Creo que es una trampa y viejas armas que han sacado de la bodega ahora para desviar la atención de las cinco bases militares que los gringos quieren después que el pueblo ecuatoriano, a través de su nueva constitución, les han dado a los gringos la patada a tras y han sido obligados de dejar la base de espionaje en La Manta. Sin embargo, refuerza la guerra psicológica y los intentos de aislamiento contra Venezuela.
Lo que si es preocupante, pero todos lo sabíamos, es que Suecia otorgó créditos por 250 millones de dólares el 1982 en garantía de crédito para la construcción de la base marina de Bahía Málaga, 20 kilómetros de Buenaventura en la costa pacífica. El organismo estatal se llama Exportkreditnämnden, EKN, y avala financiamiento a empresas suecas que operan en el mundo y si hay grandes riesgos para las inversiones, pues el EKN puede entrar y otorgar las garantías y las pérdidas si la empresa no consigue el pago por los gobiernos compradores.
Fue la constructora sueca ABV que construyó la base naval en la costa pacífica colombiana y la transnacional Ericsson que instaló el sistema de comunicación, pese que no era un secreto para nadie que Colombia desde el 1964 tenía un conflicto social y armado.
En julio 1988, estando en Colombia, pedí permiso al jefe de la obra, un sueco de la ABV, para entrar a la obra de construcción para hacer un reportaje. Pero como era la Fuerza Naval que estuvo como el “comprador”, los militares&marinos colombianos me negaron la entrada.
Al regreso a Suecia hice un extenso reportaje en el diario Flamman que ese año resultó en un escándalo para el gobierno socialdemócrata. El caso fue llevado al "Konstitutionsutskottet", KU, el órgano de revisión del trabajo del gobierno del parlamento sueco, ya que la licencia para exportar productos, conocimiento o favores militares a países en o con conflictos bélicos es prohibido, según la legislación sueca. Pero se defendieron para la financiación de la base con el argumento que serviría para cazar contrabandistas de Panamá y salvavidas para pescadores colombianos. Lo que no se decía fue que ya el 1944, expertos de Pentágono había recomendado al gobierno colombiano de instalar una base marina justamente en Bahía Málaga porque era uno de los pocos lugares naturales que tenía una profundidad excelente para recibir buques de guerra que necesitaba la profundidad para anclar allá. Pero los planes fueron archivados por 35 años.
Ahora dicen los alarmistas y las palomas que la empresa Bofors/Suecia vendió 1988 una cantidad de lanzagranadas a Venezuela, entonces gobernado por la Cuarta Republica. Lo chistoso es que ahora han encontrado tres lanzagranadas en un campamento guerrillero que fue tomado en septiembre del 2008, es decir hace casi un ano! Y primero ahora sueltan la “noticia” cuando la crítica en Colombia y en América Latina aumenta contra la ocupación de cinco bases militares por parte de Estados Unidos y el Comando Sur.
¡Y resulta que una de esas cinco bases es justamente Bahía Málaga, situada entre Ecuador y Centroamérica/Nicaragua en la costa pacifica!
Los generales gringos bajo Obama no son tímidos. El diario El Espectador dice en su edición el 17 de julio que ‘otro de los pedidos que Estados Unidos ha planteado, señala que en caso de que un tercer estado requiera colaboración militar, es asumir el mando de dicha operación, teniendo en cuenta que la intervención sería únicamente con el propósito de “defender la democracia y la libertad de la nación”.’ [1]
Es decir, que Casa Blanca esta dispuesta de utilizar la base naval de la Bahía Málaga, construida por mis compatriotas, como plataforma para lanzar una guerra contra Ecuador, Nicaragua para, como dicen ellos, “defender la democracia y la libertad de la nación”. Además, podría ser sin embargo con todo el poderío militar que tienen en Colombia contra el mismo pueblo colombiano en el caso de una sublevación popular de mayor escala que la actual insurgencia armada en el país.
Pero volviendo a la situación actual en Centroamérica y Honduras, la lógica pregunta que uno se hace es: ¿Por qué no los gringos no se prestan para restituir al presidente Manuel Zelaya en Honduras si son tan serviles si se trata de bases militares en Colombia?
Y volviendo al tema de los lanzagranadas supuestamente encontradas en la selva del departamento de Guaviare en Colombia, que es en un terreno de una selva casi impenetrable. Allá es imposible para tanques o tanquetas u otros vehículos militares a entrar y ser objetos para esa arma en supuesto poder de la guerrilla. La guerrilla podría utilizarlo en campos abiertos o en emboscadas en las carreteras, pero imposible en la selva. Y eso sabe cualquier militar o muchacho que ha hecho el servicio militar, sobre todo los colombianos. Pero se quedan callados ante el espectáculo y show mediatico de Uribe y la embajada norteamericana en Bogota. La guerrilla no tiene problemas de conseguir armas, los mismos militares colombianos, como el caso del general Samudio es ilustrativo y resulta que ese año mágico, el 1988, el general vendía un tremendo lote de armas a sus peores enemigos que eran las FARC pero los billetes no huelen nada para gente corrupta.
En Honduras o en Centroamérica, la corrupción es tan grande que hasta las madres se venden por parte de las oligarquías locales sin cerrar los ojos. Y acá había, por lo menos el 1993 según la inteligencia británica, 120 lanzagranadas suecas en el poder de los militares hondureños.
Y si los generales son capaces de hacer un golpe militar en el Siglo XXI, ¿no serían capaces de vender tres lanzagranadas en el mercado negro?

[1] http://www.country-data.com/frd/cs/honduras/hn_appen.html#table8

[2] “A EE. UU. también le interesaría estar en bases navales colombianas”, Por: Redacción Judicial / Elespectador.com, 17 Jul 2009 - 10:42 am
http://www.elespectador.com/estados-unidos/articulo151175-ee-uu-tambien-le-interesaria-estar-bases-navales-colombianas
Source: Based on information from Economist Intelligence Unit, Country Report: Nicaragua, Honduras [London], No. 1, 1994, 6; and Economist Intelligence Unit, Country Report: Nicaragua, Honduras [London], No. 2, 1993, 5.
http://www.country-data.com/frd/cs/honduras/hn_appen.html#table8
Foto: Lanzagranadas Carl Gustav 84 mm

Dick Emanuelsson (especial para ARGENPRESS.info)

HONDURAS: el Pentágono despliega sus provocaciones

Las masas hondureñas no ahorran sacrificios para movilizarse

Según algunos analistas, Honduras sería un “cinturón geo-estratégico” de la región. Tiene fronteras con El Salvador y Nicaragua, salida tanto al mar Caribe como al Atlántico, y está a un tiro de la sede del Comando del Pentágono para el Mercosur, en el Estado de la Florida. En este marco, cuenta con una base militar norteamericana muy importante, no por el número de efectivos que alberga, sino por la enorme capacidad de su aeropuerto, que permite el aterrizaje de aviones de alta capacidad de cargamento. En síntesis, es una suerte de canal de Panamá y sirve para el despliegue rápido de tropas en el terreno. Solamente un ingenuo podría suponer que el imperialismo yanqui dejaría este territorio al arbitrio de un terrateniente que ha tomado medidas populares de gobierno y afilió su país al Alba. Los yanquis no pueden admitir la perspectiva de una unión centroamericana de esos tres países que son como uno –Honduras, El Salvador y Nicaragua. El Pentágono viene aleccionado por el gesto de independencia nacional del ecuatoriano Correa, que sacó del país a la base de Manta, tal como lo había prometido. El golpe gorila ha sido, en definitiva, una hechura del imperialismo.
Los hechos posteriores lo han demostrado. La diplomacia norteamericana se ha puesto al servicio de asegurar la supervivencia de los golpistas. Los términos de la mediación del costarricense Arias lo dejan bien en claro: Zelaya volvería por un par de semanas, custodiado por un gabinete de gorilas e incluso observadores internacionales. Los gorilas mostraron su completa seguridad en el respaldo con que cuentan, cuando rechazaron semejante salida.
La crisis, desde el vamos, nunca fue un asunto interno de Honduras. Lo ocurrido luego no podía ser más elocuente: los yanquis están instalando tres bases nuevas en Colombia. El paramilitar Uribe eligió este momento para denunciar que Venezuela regala armas suecas a las FARC y también presentó un video que muestra a un jefe de la guerrilla que asegura haber contribuido a financiar la campaña electoral de Correa. Lo que es cierto, sin embargo, documentado por la BBC de Gran Bretaña, es que hay instructores israelíes entrenando a las tropas colombianas –es decir que hay en marcha una preparación de guerra. Israel (y Taiwan) es el único Estado que ha reconocido a los gorilettis; ahora, se dice, lo haría Colombia. En Panamá, el flamante Presidente de derecha anunció desde su asunción, que se daba el objetivo de producir un viraje ideológico en América Latina. En resumen, asistimos a una batalla continental. La fantasía de una OEA de iguales, luego del levantamiento de la expulsión de Cuba, quedará como otra gran pieza del ilusionismo del nacionalismo burgués.
¿La sangre va a llegar al río, como amenazó con ocurrir cuando el para-Uribe bombardeó territorio de Ecuador? Al imperialismo no le interesa, pues toda la diplomacia mundial lo respalda en la política de ganar tiempo y de armar una ficción de salida democrática. Tampoco tiene grandes posibilidades, acosado como está en Irak y Afganistán, o bajo la mirada de China, que pretende incursionar por las materias primas de América Latina.
Lo que importa, sin embargo, es defender los derechos nacionales hondureños y de América Latina – que pasa por el derrocamiento de la junta gorileta. De lo contrario, el imperialismo se servirá de cualquier capitulación para imponer su política. Según se puede apreciar en los videos, los trabajadores de Honduras están cruzando los “caminos verdes” del territorio (o sea fuera de la rutas) para sortear los retenes militares y gestar una marcha nacional contra el gorilaje. Es decir que las masas está buscando, sin medios ni orientación, producir una movilización revolucionaria. El acercamiento de Zelaya a la frontera ya dio lo que podía desde el punto de vista propagandístico. Es necesario que Venezuela, Nicaragua, El Salvador apoyen una lucha revolucionaria, con medios materiales y humanos –y con una orientación política: la constitución de una Federación Centraomericana que le abra las puertas a Costa Rica y Panamá.
Nuestros nacionales y populares se juntaron en el Mecosur para prometer que no reconocerían las elecciones hondureñas que ha convocado el golpismo. Palabrerío. Complicidad con las maniobras para desgastar la lucha popular y diluir la crisis política. A los K les preocupa que los ‘destituyentes’ no tomen ningún gesto de apoyo real a la lucha popular hondureña como un ‘causus belli’ contra el ‘diálogo’ y el Consejo Económico y Social. Estos son los impostores que pretenden constituir un ‘campo nacional’ antagónico con los grandes intereses capitalistas. Farsantes.

Jorge Altamira

jueves, julio 30, 2009

LA BATALLA DE EUROPA DEL ESTE


La situación geoestratégica en Europa se complicó de forma acusada con la agresión de Georgia contra Osetia del Sur, el 7 y 8 de agosto de 2008, que no era más que una ofensiva respaldada por el imperialismo norteamericano (entonces aún con la administración Bush) contra Rusia y contra las relaciones entre Rusia y la Unión Europea. Pieza crucial de esta jugada fue el apoyo de la mayoría de dirigentes de Europa del Este, y especialmente Ucrania, que suministró armas a Georgia para la agresión.
Hay que recordar que, precisamente hace un año, Ucrania se embarcó en una guerra de boicot al tránsito del gas ruso por su territorio hacia la UE, incumpliendo las obligaciones del contrato que había suscrito y, literalmente, robando el gas ruso.
Los gobiernos derechistas del otrora “bloque socialista” europeo, conscientes de que la recesión económica mundial golpea de forma especialmente dura sus países y de que, precisamente por ello, la fascinación que el paraíso capitalista ejercía sobre sus ciudadanos se evapora rápidamente, tratan de amarrar a toda prisa mayores vínculos con EEUU y contrarrestar la influencia de Moscú. Entre otras cosas, con la construcción de nuevos gasoductos que no pasen por el territorio ruso.
El acuerdo firmado el pasado 13 de julio por Bulgaria, Rumanía, Hungría, Austria y Turquía, para la construcción del gasoducto Nabucco, que transitará por el territorio de los países firmantes y cuenta con el apoyo de EEUU, está considerado de vital importancia para los intereses energéticos de la UE. La finalidad de este gasoducto, es precisamente la reducción de la dependencia europea respecto al gas ruso.
Tanto la dependencia de las inversiones extranjeras y de las exportaciones de la Europa del este a la Occidental han caído de forma significativa. Además, se trata de economías que han crecido sobre la base de un fuerte endeudamiento en moneda extranjera, que ahora se ve agravado por la devaluación de las monedas de estos países. Se calcula una caída media del 40% del valor de las divisas esteeuropeas respecto al dólar y una caída de sus bolsas del 77% desde los máximos logrados en 2008.
Europa del Este debe la friolera de 2,3 billones de dólares a la banca occidental. Para hacernos una idea de lo que representa esta inmensa cifra podríamos compararla con los cálculos que dicen que en la actual crisis financiera se han movilizado, alrededor de 5 billones de dólares.
Además, el proceso de endeudamiento de estos países ha sido particularmente acelerado en los últimos 3 años, justo antes de darse el cambio de ciclo, con una deuda de 1,7 billones de dólares. La Europa “emergente” se ha convertido en la subprime del continente: el 25% de las inversiones financieras occidentales en bancos de la región de los Países de Europa Central y Oriental (PECO) podrían ser “activos tóxicos”.
El Banco Mundial ha manifestado su temor a que el derrumbe del Este precipite un “efecto dominó” que desestabilice el euro y haga retroceder los avances logrados en la UE en los últimos 50 años. En 2009 deben pagarse o refinanciarse 400.000 millones de esa deuda con Europa Occidental. El FMI está tratando de aumentar la partida de “ayudas” para intentar evitar el colapso económico de estos países, pero a cambio de un ajuste brutal del gasto social y de un empeoramiento general del nivel de vida de la mayoría de la población, echando más leña al fuego de la situación social de estos países.
Estos países han pasado de ser el escaparate de la derrota del “comunismo”, a ser uno de los escaparates más vistosos de la debacle capitalista. Tras 20 años de reformas capitalistas y de servir al capitalismo occidental gracias a la incorporación de nuevos mercados, zonas de inversión, y sobre todo mano de obra barata, ese modelo ha quebrado.
De manera que el camino que se abre de nuevo a los trabajadores de estos países es la lucha por derribar el capitalismo y avanzar al socialismo. Eso sí, lejos de la deformaciones y el burocratismo estalinistas, y más en la línea marcada por la revolución rusa de 1917. El auge de esa perspectiva y el espectacular renacimiento de las huelgas y las manifestaciones obreras pone de los nervios a la derecha esteeuropea.
Además, las propuestas del presidente de Rusia, Dimitri Medvédev en relación a la creación de una nueva arquitectura de seguridad en Europa, suponen una horrible pesadilla tanto para la derecha esteeuropea como para los propios EEUU. Lo que les lleva a unos y a otros a presionar a la UE para reforzar la OTAN, urgiendo la entrada de Ucrania y Georgia en esa alianza militar dominada por EEUU. Se trata así de continuar con la agresiva política exterior imperialista de la administración Bush.
Un ejemplo se encuentra en el proyecto de situar en Polonia y República Checa el llamado escudo antimisiles norteamericano, un ambicioso proyecto impulsado por Bush consistente en cercar la frontera ruas con misiles de respuesta rápida, y que Rusia ve claramente como una amenaza para su propia seguridad, a pesar de que la administración estadounidense asegure que son para “defenderse” de hipotéticos ataques de Irán o Siria.
En este escenario, el pasado 15 de julio se hizo pública una carta abierta de dirigentes derechistas de Europa del Este a Barack Obama, en la que piden a Washington que mantenga una “política firme” frente a Rusia. Los firmantes insisten en que sus países son fieles aliados de EEUU y manifiestan su preocupación porque “la nueva administración de Obama ajusta sus prioridades en política exterior” y comience a dirigir la atención a otras áreas consideradas más estratégicas.
Este patético llamamiento a que los amos norteamericanos los tengan más en cuenta, está firmada, entre otros, por Lech Walesa (Polonia), Vaclav Havel (República Checa), Valdas Adamkus (Lituania), Emil Constantinescu (Rumanía), Michal Kovacz (Eslovaquia), Aleksander Kwasniewski (Polonia) y Vaira Vike-Freiberga (Letonia). Y aparece inmediatamente después de que la administración Obama firmara un acuerdo con Rusia para reducir su armamento nuclear.
En definitiva, y lejos de los focos de los mass-media occidentales, una batalla decisiva se está librando en la Europa del Este.

Teodoro Santana,miembro del Comité Central del Partido Revolucionario de los Comunistas de Canarias (PRCC)

http://prcc-canarias.org/

Honduras: con el pueblo y sin Arias

Mientras más crecen la resistencia de los hondureños contra la dictadura y la solidaridad internacional con su causa, más se empeña Washington en reflotar la desacreditada “mediación” de Óscar Arias, varita mágica para consolidar el golpe de Estado y, en todo caso, desgastar al movimiento popular.
De Arias habría que decir que en donde menos se le cree es en la propia Costa Rica. Allí es notorio su protagonismo en la aplicación de las políticas neoliberales, las corruptelas a ellas unidas, la forma tramposa y mendaz con que instrumentó el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y, en particular, el referendo respecto a su aprobación, que se vio forzado a convocar. Para ganarlo, el Nóbel recurrió a las prácticas más antidemocráticas y fraudulentas. En cuanto a Nicaragua y el resto de Centroamérica, los pueblos no olvidan su contumaz subordinación a Estados Unidos y menoscabo del sandinismo cuando arbitraba las negociaciones de paz sobre aquel país.
Al inventar la mediación de Arias, la secretaria de Estado Clinton anulaba gran parte de la fuerza de las resoluciones adoptadas por la OEA, la ONU y el Grupo de Río, que exigían la restitución “inmediata e incondicional” de Manuel Zelaya en la presidencia de Honduras. Negociar con los golpistas entraba en abierta contradicción con el consenso internacional y dotaba a aquellos de una personaría jurídica y política no reconocida por los países latinoamericanos y europeos, que, a diferencia de Washington, retiraron sus embajadores del país centroamericano. Al verse tácitamente reconocidos por Washington, los hasta entonces acosados personeros del tambaleante régimen de facto se llenaron de ínfulas, al extremo de rechazar las propuesta de Arias pese a que ataban de pies y manos a Zelaya, al tiempo que la ultraderecha de Estados Unidos y el Departamento de Estado aprovechaban para redoblar la campaña internacional de relaciones públicas a su favor. La publicación en el Wall Stret Journal de un largo artículo del jefe civil de la dictadura militar es una prueba irrefutable de la enorme simpatía de que gozan los gorilas en importantes círculos económicos y políticos del norte revuelto y brutal.
Es evidente la existencia de importantes contradicciones en el equipo de Obama y la elite del poder imperial ante la cuestión de Honduras, como frente a otros importantes temas internacionales, pero en lo que no tienen desavenencias, aunque puedan diferir en las formas y plazos, es en el objetivo de liquidar a la Cuba socialista y a los gobiernos populares de la región investidos por sus pueblos en Asambleas Constituyentes. Esa es la objeción central del imperio y las oligarquías contra Zelaya: su voluntad de consultar al pueblo sobre la convocatoria a una constituyente. Por cierto, no para reelegirse, por más que esta sea una aspiración legítima cuando responde a la inspiración popular, toda vez que la hipotética constituyente se reuniría tiempo después de haber Zelaya abandonado el cargo. El objetivo fundamental que buscaba el presidente era una constitución salida del pueblo y no de una dictadura militar, como la vigente.
Si ello preocupaba al imperio y las oligarquías antes del 28 de junio, día del golpe, un mes después se ha vuelto una pesadilla a la vista del extraordinario y raigal Frente Popular de Resistencia contra el Golpe de Estado, que en su crecimiento, ha logrado atraer a su seno a muchos miembros de base de los partidos políticos tradicionales, irremediablemente despedazados después de esta coyuntura. Podrá Zelaya regresar antes o después a asumir su mandato, pero ya en Honduras ha surgido una creativa experiencia de cómo enfrentar con el pueblo organizado y radicalizado la nueva generación de golpes de Estado que planean ejecutar en América Latina sectores del imperio y las oligarquías. Las bases yanquis que pronto apuntarán contra Venezuela y los movimientos y gobiernos populares de la región, y la IV Flota forman parte de este diseño agresivo.
La insistencia de Washington, Insulza y los gobiernos derechistas en resucitar la mediación de Arias ya no busca sólo consolidar a los golpistas sino evitar a toda costa su derrocamiento por una insubordinación popular, acontecimiento que desbordaría con creces a Honduras y se proyectaría como una gran victoria continental de las fuerzas populares contra la nueva contraofensiva del imperio y las derechas locales.

aguerra_123@yahoo.com.mx

miércoles, julio 29, 2009

Honduras: las manos


Manos que hablan y se expresan. Manos que se extienden, gritan, que se abrazan. Manos que por generaciones estuvieron apretadas sosteniendo dentro de sus puños la libertad negada. Manos morenas atadas por la soga ávida del verdugo. Manos obedientes, calladas, resignadas.
Manos que entregan la última gota de su sangre sin recibir nada a cambio. Manos que labran la tierra para el amo. Manos que entierran a sus niños desnutridos. Manos esculpidas bajo la maza de todas las infamias. Manos que se comienzan a abrir para unirse a otras manos, comprendiendo finalmente su derecho a vivir en libertad.
Desde la hondura de su historia maniatada un pueblo se anima a desatarse. Se le anima al amo que durante siglos lo condenó a la pobreza más indigna. Bastaba un aire fresco, un nuevo viento que les devolviera su amordazada identidad. Entonces, esas manos doradas comenzaron a abrirse para tomar lo suyo. Pero hasta aquí nomás, dijo el amo, y volvió al atropello con sus botas, y sus tanques y sus balas. Muñequitos a cuerda que ejecutan los designios de sus dueños. Sin embargo el pueblo dijo basta, gritando al unísono también ellos: ¡Hasta aquí nomás! Y salió a la calle, a su tierra, a sus montañas porque ya no tienen miedo. Con agallas y sin dudarlo decidieron defender lo que estaban empezando a construir: su destino. Sus manos alzadas se transformaron en escudos, pero también en espadas.
No podía llamarse de otro modo, más que Alegría, el portavoz de esta resistencia. Porque eso se percibe en ese pueblo que se niega a abandonar sus calles, sus rutas y sus campos. Con la alegría de quien tiene la justicia entre sus manos resiste, exige y denuncia frente al mundo entero este nuevo ultraje que, esta vez, no dejarán pasar. No son hordas salvajes, no son energúmenos que juegan a las cartas con el poder, son hombres y mujeres que forjaron con sangre y los huesos de sus muertos esa tierra siempre devastada por el de afuera. Están recuperando su tierra con la alegría de quien se sabe dueño de cada roca, cada río, de cada bosque. Están dando esos primeros y trascendentales pasos que marcaran su rumbo hacia el futuro.
Las Manos, también se llama la línea divisoria entre dos países. Sobre esa línea sutil, pero profunda de historias compartidas, se está librando una batalla que será decisiva para el futuro. La palma de la tierra, junto a la palma de las manos que no ceden, que no se asustan, que se entrelazan y crecen junto a esta pueblada que marcará rumbos más allá de sus fronteras. Cuando un pueblo despierta difícil es volverlo a dormir de un cascotazo, y este pueblo se está despertando, como tantos otros en el continente con el horizonte de soberanía entre los brazos. El futuro siempre es imprevisible, ni los propios golpistas esperaban esta patriada como respuesta a sus viejos métodos de invasión, el terror siempre funcionó. Pero Honduras está sosteniendo la dignidad y su porvenir con las manos abiertas y limpias, se niegan a que le roben el presente, porque éste es el presente que eligieron para empezar a escribir una nueva historia.

Virginia Giussani (especial para ARGENPRESS.info)

La verdadera cara de Estados Unidos en Honduras


Ningún hombre tiene derecho a decir a su país “hasta aquí no más llegarás” (Charles Stuart Parnell, 1882)

Hoy se cumple un mes del golpe cívico-militar en Honduras encabezado por el millonario presidente del Congreso, Roberto Micheletti y el general Romeo Vásquez Velásquez. El presidente constitucional Manuel Zelaya fue destituido, arrestado y enviado a Costa Rica por estos dos hombres que decidieron poner límite a la marcha de la nación al futuro propuesta por Zelaya y que fue apoyada por la población. A pesar del rechazo unánime de la comunidad internacional y de organizaciones como la ONU, la OEA, la Unión Europea, el ALBA, la Comunidad Andina, los Países No Alineados, el Grupo de Río, el Mercosur etc., los golpistas siguen con su agenda como si no le importase la opinión mundial pues se saben amparados.
Micheletti y su banda saben perfectamente que todo lo que han hecho y que todas sus leyes nuevas son ilegítimas, al igual como lo supo Pinochet y todos los golpistas como él. Sin embargo, se atrevieron porque contaban con la aprobación de la primera potencia del mundo – Estados Unidos. Esta vez, la señal que recibieron del Gran Patrón para derrocar a un presidente constitucional fue porque se atrevió a orientar su país hacia la Alianza Bolivariana y poner en peligro la existencia de la más grande base Norteamérica en América Central – Soto Cano.
Entonces Michiletti se sintió el “elegido” para hacerlo. Tomada la decisión, el embajador norteamericano en Honduras Hugo Llorens quien admitió haber participado en reuniones en Soto Cano, donde discutieron planes del golpe, abandonó abruptamente el país como si quisiera mostrar que “esta obra nos es mía”.
Así se inició el juego cínico de EE.UU. que no reconoce que hubo un golpe de Estado sino “una acción ilegítima de Michiletti”. Al comienzo, el departamento de Estado confió en la OEA, la tarea de ‘solucionar la crisis en Honduras’, olvidándose que soplaban vientos nuevos en América Latina. Al darse cuenta que la OEA ya no era lo que fue, transfirió abruptamente la tarea a su servidor Oscar Arias para estancar el proceso del retorno de Zelaya al poder.
Zelaya lo dijo: “a Estados Unidos le bastaría 15 segundos para sacar del poder a la junta cívico-militar”. A la vez el ministro de relaciones exteriores del Brasil Celso Amorin llamó a Hillary Clinton diciendo que era hora de poner fin al gobierno de Micheletti con una acción simple, cancelando las visas a EE.UU. a los golpistas y sus seguidores. Su plata está en los bancos norteamericanos y sus condominios, en Miami. Por supuesto que Hillary no se atreve a hacerlo porque ‘coincidentemente’ los dos abogados de Bill Clinton: Lanny Davis y Bennett Ratcliff son asesores de Michiletti.
El republicano Connie Mack que encabezó la delegación de congresistas demócratas y republicanos que fue a Honduras para dialogar con Michiletti, dijo que “Zelaya se convirtió en discípulo de Chávez y estaba listo para expandir la Revolución Bolivariana en Honduras si no lo hubieran arrestado y deportado los militares”.
Estados Unidos ya debe quitarse su careta y apoyar abiertamente a su nuevo Pinochet, porque ya se sabe el rol que juega en la tragedia de Honduras, país que entró en la vorágine de represión, asesinatos, desapariciones y tortura.

Vicky Pelaez (ELDIARIONY, especial para ARGENPRESS.info)

Entrevista al dirigente haitiano Henry Boisrolin

“Nuestro pueblo seguirá resistiendo a las tropas de ocupación de las Naciones Unidas”

En Latinoamérica hay un país que no sólo fue el primero en liberarse sino que ayudó a que otras naciones sojuzgadas por los españoles aceleraran el camino de su emancipación. Se trata del más olvidado y mancillado de los sitios de nuestro continente: Haití. Allí precisamente se está desarrollando una importante escalada de resistencia popular no sólo contra el mal gobierno de René Preval sino también contra quienes afirman estar en suelo haitiano para colaborar con su población. Nos referimos a las tropas de las Naciones Unidas (MINUSTAH).
Más concretamente, a finales de 2008, la MINUSTAH contaba con la participación de 9.028 uniformados (7.009 soldados y 2.019 policías), apoyados por 502 funcionarios internacionales, 1.197 funcionarios nacionales y 205 voluntarios de la ONU, todos bajo la comandancia de militares brasileños.
Estas tropas mercenarias, entre las que hay argentinos, uruguayos, brasileños, chilenos, bolivianos y de otros países, operan represivamente contra la población haitiana y es por ello que desde allí surgen innumerables denuncias, que en general quedan en la total impunidad.
Uno de los casos documentados por organizaciones haitianas de derechos humanos es la masacre ocurrida el 22 de diciembre de 2006 en la comunidad de Cité Soleil, luego de una manifestación de cerca de diez mil personas que demandaban el retorno del ex presidente Jean-Bertrand Aristide al país y la salida de los efectivos militares extranjeros. Según relatos de la población local e imágenes de vídeos producidos por la organización Haiti Information Project – HIP (Proyecto de Información de Haití), las fuerzas de la ONU atacaron a la comunidad y mataron a cerca de 30 personas, incluyendo a mujeres y niños.
Esto ocurre también en un marco de silencio generalizado a nivel informativo. Haití no cuenta en las crónicas de periódicos y mucho menos en las pantallas televisivas. Sus gentes no entran en las estadísticas poblacionales. Pero a pesar de ello, el pueblo no se resigna a la dominación, y lucha.
De esta realidad y sus consecuencias en Latinoamérica conversamos con el dirigente del Comité Democrático Haitiano, Henry Boisrolin, quien recientemente ha llegado desde la capital haitiana en misión de recabar la urgente solidaridad con quienes hoy están a la cabeza de la resistencia popular, los estudiantes universitarios y secundarios que se encuentran, desde hace meses, ocupando varios de los establecimientos educacionales.
-Cuál es la situación de Haití en la actualidad?
-Haití se encuentra bajo ocupación pero la gran prensa internacional presenta este hecho como si fuera “ayuda humanitaria”. Incluso el nombre mismo de la Misión de la ONU dice que es “para la estabilización de Haití”. Hay una combinación de 40 países integrantes de esta Misión y desgraciadamente tenemos tropas latinoamericanas adentro del país. Como es sabido, la comandancia militar se encuentra bajo el liderazgo de Brasil. Esto es algo que nosotros rechazamos porque entendemos que es una violación de nuestra autodeterminación, de nuestra soberanía y dignidad como pueblo.
La resistencia proviene de distintos sectores de la población, pero últimamente son los estudiantes universitarios, a los que se suman algunos de colegios secundarios, los que han ganado las calles para exigir el retiro de las tropas y la promulgación de una ley sobre salario mínimo votada por el Parlamento. Lo que ocurre es que el gobierno de Preval no lo acepta, bajo el pretexto de que si Haití ya tiene un 70% de su población activa en el desempleo, promulgar una ley que signifique aumentar de 1,70 dólares a 4 o 5 dólares el salario mínimo por día, “va a provocar una avalancha de despidos y agravará aún más la situación de los trabajadores” Para los estudiantes, esta respuesta es una nueva falacia del gobierno, y han planteado acciones de resistencia, ocupando varias Facultades.
-¿Cómo reaccionó el gobierno de Preval?
-Reprimiendo a los estudiantes. Ha habido varios muertos y decenas de detenidos, profesores perseguidos, se lanzaron bombas de gases lacrimógenos y balas de plomo sobre los manifestantes. La Misión de las Naciones Unidas ha sido acompañar a la policía haitiana en toda esa tarea represiva. Esto es lo que queremos denunciar y a la vez pedir solidaridad para que los gobiernos latinoamericanos entiendan que esa no es la vía, que Haití no necesita de tropas militares. Lo que nosotros precisamos es el tipo de ayuda que brindan Cuba y Venezuela, ése es el modelo valedero de apoyo, de humanidad, de respeto a nuestra independencia y soberanía.
-Vamos a detenernos en este último tema. Las tropas de Naciones Unidas dicen que ellos van para cumplir tareas humanitarias. Eso es al menos lo que explican las cancillerías de los países que están complicados en esta maniobra, como Argentina, Uruguay, Brasil y otros. Incluso, algunos partidos progresistas se encargaron de explicar que “era mejor que vayan las tropas latinoamericanas a que Haití esté invadido por los EEUU”. ¿Qué opina de esos planteos?
- Antes que nada, hay que desmentir algo: no hubo ninguna autoridad legítima de mi país que pidiera tal intervención, eso es una mentira. En el año 2004, el del Bicentenario de nuestra independencia, había un presidente legítimo que era Jean-Bertrand Aristide. Había disturbios en el país, y bajo esa excusa entró un comando militar norteamericano que lo secuestraron, lo pusieron en un avión y lo mandaron al exilio, en la República Centroafricana y ahora está en Sudáfrica. Algo muy parecido a lo que han hecho ahora con el presidente Zelaya. No son casos aislados y sientan precedentes que amenazan la seguridad y la democracia en el resto de los países latinoamericanos.
Así es la historia, nadie pidió tal intervención. Ellos impusieron un gobierno de facto que organizó las elecciones y ahí ganó Preval, legitimando el golpe, igual al intento actual en Honduras.
Sí es cierto que el presidente Preval, que ganó los comicios, solicitó el mantenimiento de la Misión de la Minustah, pero originalmente no hubo ninguna autoridad haitiana que haya pedido esto.
Por otra parte, no porque Preval lo haya hecho, tiene que ser el sentir del pueblo haitiano, esa es otra falacia. Habría que ir a Haití y andar por las calles de sus barrios más populares, para comprender el rechazo mayoritario de la gente a la presencia de las tropas de ocupación.
-¿Cómo actúan esas tropas invasoras?
-El accionar de las tropas de las Naciones Unidas es algo que indigna a cualquier ser humano con un poquito de sensibilidad. En un país donde hay un 70% de su población activa que no tiene trabajo, donde tenemos una tasa de mortalidad infantil superior al 80 por mil y una tasa de analfabetismo, en el campo, que supera el 70% y en las ciudades el 50%, o donde se da una esperanza de vida que no supera los 50 años. Estamos hablando de un país con sus estructuras económicas destruidas, donde el 60% del presupuesto haitiano proviene de la ayuda internacional y de las remesas que envían los haitianos que trabajan fuera. Por todo ello, plantear que hay que ir con tanques, aviones y helicópteros para resolver eso, es totalmente falso y cruel.
¿Qué han hecho estos “salvadores”? Han violado a niñas y mujeres haitianas, han golpeado y torturado a nuestros jóvenes. No lo decimos nosotros, sino que una propia investigación de la ONU confirmó esos hechos, y lo único que se hizo fue sacar a algunos soldados y mandarlos a su casa, porque según el Convenio de la Resolución 545, que permitió la entrada de las tropas el 1º de junio del 2004, Haití no tiene derecho de juzgar a ningún militar extranjero, por más que haya cometido crímenes de lesa humanidad. Más sometimiento que eso, no puede existir. Y hay que decir que hay soldados de Sri Lanka, de Uruguay y de otros países, acusados de estos abusos.
-O sea, violaciones de derechos humanos realizados dentro de una “legalidad” impuesta, que asegura más impunidad…
-Exacto. Pero hay otro tema que quiero abordar y que a veces queda postergado porque profundizamos más en estudiar la realidad política o económica de un país. Me refiero a la dignidad humana, el valor de la relación y los sentimientos humanos, el contacto entre los pueblos. Es decir, una historia en común. Haití, después de independizarse, brindó una solidaridad efectiva a muchos pueblos latinoamericanos, ayudó a Miranda, a Bolívar, en dos oportunidades, con fusiles, con dinero y otros suministros, pero fundamentalmente con voluntarios. Centenares de haitianos murieron por la independencia de Venezuela y otros países. Por eso decimos, que recibir este trato actual es una afrenta para la historia. Nuestra gente no cometió ningún crimen, salvo pedir mayor justicia. Y sufrimos un comportamiento mercenario, porque muchos de estos invasores vienen por la paga, ganan miles de dólares sin gastar absolutamente nada. En seis o siete meses que están allí, vuelven a sus respectivos países con una buena cantidad de dinero en mano, cosa que no pueden tener en sus lugares de origen.
Entonces, aprovechando una situación de debilidad, de falta de capacidad del movimiento popular haitiano para revertir esta situación, vienen y te avasallan.
Hay que ver, por ejemplo, en Puerto Príncipe, en algunos de los barrios más acomodados, como a la noche (porque no hay prácticamente vida nocturna en Haití, no hay luz, ni los servicios que se pueden encontrar en otros países) se ve un continuo desfile de autos de las Naciones Unidas, al frente de los mejores bares y restaurantes, gastando muchos dólares, y afuera el pueblo durmiendo en las calles.
-Es realmente ofensivo e indignante…
-Esto llama a la reflexión, porque hemos escuchado a algunos gobiernos, cuando pasan los huracanes o suceden otros acontecimientos climáticos, decir que las tropas están alli precisamente para ayudarnos en los malos momentos. Pero eso no es lo determinante ni mucho menos. La ocupación de Haiti es un nuevo esquema para doblegar a la rebelión popular en un país donde las clases dominantes no tienen posibilidad alguna de ganar las elecciones de manera limpia. Entonces, hace falta imponer, por la fuerza de las armas una estrategia de dominación. Ese es el verdadero rol de los ocupantes. Y para quienes dicen que “mejor esas tropas en vez de las de EEUU”, nosotros decimos que es todo lo contrario. De la otra forma hubiéramos tenido enfrente al enemigo de manera más clara. En cambio, ver a hermanos latinoamericanos enviados por gobiernos que tendrían que tener otro tipo de comportamiento frente al drama haitiano, es durísimo. Yo estuve en barrios populares muy castigados por estas tropas, y escuché lo que dice el corazón de esa gente. La indignación con que cuentan cómo bombardean en horas de la madrugada para sacar supuestos bandidos de estos barrios. O cuando los soldados entran en tropel y patean las puertas, arrastrando fuera a los aterrorizados pobladores. Por eso no hay lugar a más mentiras: se trata de una ocupación lisa y llana de la República de Haití, y en la medida que esta situación siga, habrá más resistencia.

Carlos Aznárez
Rebelión

Nueva etapa en la “Guerra de IV Generación”

Las bases militares yanquis en Colombia vendrán armadas hasta los dientes con propaganda magnicida

Este es un momento decisivo para los medios comunitarios y alternativos
Tal cual opera el cinismo del imperio norteamericano (pruebas hay a raudales) se ha iniciado una estrategia mediática insolente y extraordinariamente peligrosa. En unas cuantas semanas, en toda Latinoamérica, se desató con furia la amenaza golpista contra las democracias verdaderas y la moraleja monstruosa del gorilismo. Todo financiado y santificado por las oligarquías y sus mass media . No hay país (salvo Cuba) en el que no se repitan, a mañana tarde y noche (y hasta la náusea), las “bondades” de modelo dictatorial ensayado en Honduras y bendecido por el gobierno yanqui. Tsunami de saliva ponzoñosa destilada por “periodistas”, “comunicólogos” y opinólogos amaestrados con la lógica del entreguismo, el consenso de la CNN y la “escuela de Miami”. Terrorismo mediático “reloaded”. Hilary sueña con ser la heroína de una pesadilla infernal. No será tan fácil.
En la mira están Venezuela y Chávez... está Ecuador, Bolivia y Cuba. Están todos los que sueñen con un mundo liberado del capitalismo y sus salvajadas. Lo sabemos sobradamente. Los pueblos decididos a emanciparse ocupan el primer lugar en la lista del delirio dictatorial que ahora “legaliza” sus perversiones a punta de metralla “informativa” secundada (o precedida) con golpizas, detenciones y asesinatos. Andanada de canalladas avalada por diputados y leguleyos genuflexos al servicio del saqueo, la explotación y la corrupción más degenerados. Criminales todos que ahora sienten el aval “moral” de las bases militares en Colombia. Su “silencio” los delata. El mensaje esta claro. ¿Qué hacer?
La “Guerra de VI Generación” tiene por tarea inocular la idea de que es posible descarrilar los proyectos democráticos. Hacer creer que sus gobiernos son “ débiles”, “ausentes”, “incapaces”... y que, por tal “debilidad”, los pueblos dan la espalda a sus líderes y a su lucha emancipadora. A cualquier costo se proponen invadir los territorios, las riquezas naturales, la mano de obra y las cabezas... se proponen dar marcha atrás a la Historia y borrar a punta de bayoneta y misiles mediáticos la memoria combativa de los pueblos que hoy protagonizan su revolución y la quieren permanente. Pero el mundo ya no es el mismo y la crisis que ellos le imponen al planeta no la pagaran los pueblos democráticos. Que la crisis la paguen los que la ocasionaron.
Por eso las tareas que se imponen sobre el escenario actual, requieren de la unidad, de la organización, de la movilización continental para la construcción de un programa capaz de profundizar los logros sin olvidar la autocrítica proactiva. Es hora de incrementar las fuerzas emancipadoras. Es hora de los frentes convergentes y continentales.
Ninguna estrategia diplomática derrotará, por sí sola, las ambiciones golpistas que emanan de las perversiones oligárquicas. Sólo la lucha unida y organizada de las masas de trabajadores y campesinos, con sus movilizaciones en las calles, derrotará a los terratenientes, a los banqueros, a los burócratas y a las sectas reformistas... sólo el movimiento de las masas derrotará al imperio si se arma con un programa socialista. Es preciso frenar las ambiciones Imperiales que en Honduras y en Colombia dan aviso de una etapa dura y peligrosa. Es preciso rechazar cualquier tipo de “negociación” con los golpistas, estén donde estén. Es indispensable la radicalización continental de una organización popular que no necesite pedir permisos ni referéndum a ninguna asamblea de diputados corruptos y si muy por el contrario se convierta en asamblea constituyente y continental ella misma. Sólo así podremos frenar, en esta etapa, los delirios de las oligarquías desorbitadas en su degeneración sanguinaria.

Ni desesperados ni cruzados de brazos

Es impostergable derrotar de inmediato esta aventura de la “Guerra de IV Generación” y es fundamental aumentar la confianza en nuestras fuerzas propias. La contrarevolución dictada desde el imperio yanqui es una escuela de formación histórica, política y estratégica para los pueblos. La contrarrevolución, que se diseña desde el Pentágono, se funda en el cinismo de golpes “cívico-militares” con el apoyo de los partidos políticos corruptos en todo el continente y la complicidad obscena de las jerarquías eclesiásticas abrazadas con los monopolios de los mass media . Este es el plan del establishment contra toda expresión democrática de las bases y se disponen a destruirlas a cualquier costo. No están dispuestos a permitir que sobrevivan las luchas emancipadoras sean de donde sean. La única salida para los pueblos es continuar la movilización contra toda forma de golpe de estado en los hechos y en las cabezas. Es preciso animar la organización de comités en cada centro de trabajo, barrio y pueblo. Es preciso llamar a las filas del ejército, a los soldados de cada país que son también parte del pueblo. Trabajar con las ideas y con la divulgación de un plan continental de defensa contra los efectos de la “Guerra de IV Generación”. Debemos blindar la inteligencia, las emociones y la sensibilidad de los pueblos contra la metralla de falsificaciones y distorsiones que ya se cocinan en los laboratorios psicológicos del imperio.
El arma principal de la clase trabajadora contra todas las ilusiones criminales del capitalismo es la Huelga General con un programa socialista. Sin el trabajo de la clase obrera las oligarquías no pueden mover ni un tornillo, ni una ruada ni un foco. Los pueblos organizados con un programa de defensa y de transformación socialistas pueden transformar muy rápido el continente y evitar que funcione cualquier delirio golpista. La solidaridad internacional de la clase obrera en pleno movimiento internacionalista es crucial. No hay tiempo que perder. Corriente Internacional de la Comunicación hacia el Socialismo. Por una Cumbre Latinoamericana de los pueblos en materia de Comunicación.

Fernando Buen Abad Domínguez
Rebelión

martes, julio 28, 2009

Wall Street Journal publica editorial del dictador Roberto Micheletti, justificando el golpe de estado en Honduras


El reconocido periódico financiero estadounidense publicó hoy una editorial del dictador hondureño Roberto Micheletti, bajo el título, “El camino delante para Honduras: La salida del poder de Zelaya fue un triunfo para el estado de derecho.” El artículo comienza destacando a Honduras como “uno de los aliados más leales” de Estados Unidos en América Latina, y lamenta que “los hechos claves de la crisis [en Honduras] han sido ignorados por los líderes estadounidenses.”
Luego, el usurpador Micheletti relata una seria de puntos, que según él, son “hechos fundamentales que no pueden ser negados”. Estos incluyen a las acusaciones que han venido haciendo los golpistas en contra del Presidente Zelaya, como la decisión de la Corte Suprema sobre la “ilegalidad” de la encuesta popular que hubiese tomado lugar el 28 de junio pasado, el día del golpe, y la supuesta órden de la Corte Suprema sobre la detención de Zelaya por parte de las fuerzas armadas hondureñas.
Micheletti no explica el secuestro violento y el exilio forzado del Presidente Zelaya por parte del ejército hondureño, ni el hecho de que esa acción es un crimen bajo el derecho internacional y también bajo la propia Constitución de Honduras, que específicamente dice que un ciudadano no puede ser expulsado de su país.
En su editorial, el dictador Micheletti intenta jusificar las acciones de la Corte Suprema y el Congreso hondureño, luego del secuestro del Presidente Zelaya, diciendo que tales decisiones fueron tomadas por “una mayoría de los miembros del partido Liberal, que es el partido del señor Zelaya.” Pero no explica que igualmente, sin importar su afiliación política, sus acciones violaron la Constitución de Honduras, la cual no permite destituir a un presidente legítimamente electo por su pueblo. Micheletti intentó jusificar ésta acción criminal diciendo que Zelaya estaba “intentando extender su mandato con un referéndum ilegal”. Sin embargo, no explica tampoco que la encuesta popular se trataba de incluir una cuarta urna durante las elecciones en noviembre sobre una posible reforma constitución para el año que viene. El mandato del Presidente Zelaya termina en enero 2009, y a partir de noviembre, el pueblo hondureño hubiese ya elegido a un nuevo presidente. Asi que, no existía ninguna posibilidad por parte del Presidente Zelaya de “extender a su mandato”. El miedo de Micheletti y los golpistas no se trataba del mandato del Presidente Zelaya, se trataba de la posibilidad de que pueblo hondureño tuviera mayor participación en su proceso político.
Por otro lado, el artículo de Micheletti acusa al Presidente Zelaya de robar “millones de dólares” del Banco Central de Honduras “en efectivo” días antes de su “arresto”. Es primera vez que se escucha ésta grave acusación contra el Presidente Zelaya, la cual no está fundamentada con ninguna evidencia. ¿Dónde están los millones de dólares en efectivo? ¿Cómo pudo retirarlos del Banco Central sin ninguna restricción? Tal acusación constituye una difamación peligrosa contra el Presidente Zelaya y debe ser corregida lo antes posible.
Finalmente, en su editorial, el dictador Micheletti habla de la necesidad de trabajar con la propuesta del Presidente de Costa Rica, Oscar Arías, para llegar a una solución. Sin embargo, Micheletti dice que el Presidente Zelaya “no es confiable y no obedecerá la ley” y entonces, “debe ser detenido y enjuiciado” en caso de volver a Honduras. Obviamente con está declaración, el líder del régimen golpista está reafirmando su rechazo a la propuesta del Presidente Arías, porque la base fundamental de dicha propuesta es el regreso del Presidente Zelaya al poder.
Micheletti termina su artículo suplicando al pueblo y al gobierno estadounidense para que no impongan sanciones económicas contra su país, ya que esa medida “principalmente haría daño a los más pobres”. Agrega que “en lugar de imponer sanciones, EEUU debería continuar las políticas sábias de la Sra. Clinton”. Esa última frase hace clara que los golpistas consideran que Washington está a su lado.
El Wall Street Journal ha abogado a favor del golpe en Honduras desde el primer día, e incluso ha publicado una seria de artículos que intentan acusar a Venezuela y al Presidente Hugo Chávez por haber causado la crisis en el país centroamericano. La articulista quien más ha promovido esta posición es Mary Anastasia O’Grady, conocida por sus múltiples escritos en contra de Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador y Honduras. O’Grady ha publicado decenas de artículos que intentan vincular a Venezuela con el terrorismo y el narcotráfico, sin presentar ni una sóla prueba o evidencia que fundamenta sus graves acusaciones. Ella se ha convertido en una vocera extrémamente reaccionaria que atenta contra los gobiernos no subordinados a los intereses de Washington.
El Wall Street Journal forma parte de la empresa noticiosa Dow Jones News Corporation. Su dueño es el poderoso multi-millonario Rupert Murdoch, quien a través de su monopolio mediático, News Corporation, controla a cientos de periódicos, revistas, canales de televisión y emisoras de radio a nivel mundial. Murdoch es muy conocido por su canal estadounidense Fox News Channel, que promueve la visión imperialista y neoconservadora de Estados Unidos. Algunas de sus otras empresas medíaticas incluyen a National Geographic Channel, The Film Zone, todos los canales y estudios FOX, Cine Canal, MySpace (internet), HarperCollins (editorial de libros), New York Post (periódico), The Sunday Times (Reino Unido), The Sun (Reino Unido), entre muchos otros.
El Wall Street Journal es un diario con una circulación por encima de dos millones de ejemplares diarios a nivel mundial y 931,000 usuarios en internet. La editorial del dictador Roberto Micheletti fue escrita y promovida por su lobbista en Estados Unidos, el abogado Lanny Davis, quien es amigo íntimo y abogado del ex presidente Bill Clinton y su esposa Hillary, actual Secretaria de Estado del Presidente Barack Obama.

Eva Golinger

Colombia, todo...todo por el TLC


Con la declaración oficial de que el país ya está en recesión, el presidente colombiano, Álvaro Uribe busca por todos los medios concretar el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, aunque para lograrlo tenga que empeñar la soberanía nacional al entregarle a Washington varias bases militares en el territorio.
A finales de junio, Colombia entró en recesión, según informó el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), después de 10 años de crecimiento continuado aunque esos resultados no se hayan revertido en mejoras sociales y económicas para su población.
Antes de concluir 2008, el gobierno aseguraba que el país estaba blindado contra la crisis económica internacional, pero ahora ha reconocido que en el último trimestre del pasado año la economía decreció 1 % y en el primer trimestre de 2009 lo hizo en 0,6 %. El Presidente, sus ministros y empresarios colombianos han construido prácticamente un nuevo camino hacia Washington con las idas y venidas realizadas en los dos últimos años para tratar de convencer a congresistas y senadores estadounidenses opuestos al TLC (por los asesinatos de sindicalistas y las violaciones constantes de los derechos humanos en el país andino).
Semanas antes de dejar la Casa Blanca, el ex mandatario George W. Bush dijo en una reunión con Uribe que el TLC era “necesario” para la seguridad nacional de Estados Unidos.
El 30 de junio último, Uribe regresó a EE.UU. y le expuso a Barack Obama, (quien se había opuesto anteriormente al Tratado) las bondades de este.
Para estar más en línea con las disposiciones que exige el TLC, y a la par embullar a congresistas norteamericanos indecisos, el gobierno de la nación andina ha impulsado un amplio programa de privatizaciones en todos los sectores de la producción, la minería y los servicios.
El Estado sacó a la venta las empresas de electrificación de Cundinamarca, Boyacán (Ebsa), Pereira, Santander, Norte de Santander y Meta. En el ruedo también se halla Termocan-delaria, por la que se interesa el grupo chileno Solari. En cuanto al sector financiero, el Estado cederá la propiedad de 12,4 % que controla en el Banco Popular. Antes de que se acabe de aprobar el TLC, ya la estadounidense General Electric adquirió un paquete de acciones del Banco Colpatria, construirá una planta para la fabricación de químicos de purificación de aguas y compró una empresa dedicada a esa actividad industrial. Mientras, Munich Re fortaleció sus acciones en Inversura, holding de salud, riesgos profesionales y seguros.
La transnacional Glencore ha invertido, junto a Ecopretrol, en la ampliación de la refinería de Cartagena para elevar el procesamiento de crudo de 75 000 a 150 000 barriles diarios.
En la industria hotelera las cadenas transnacionales Hyatt, Milton, NH, Fronpeca, Marrito y Honesta invierten más de cuatro millones de millones de pesos colombianos, mientras compañías estadounidenses y europeas lo hacen en el sector de la aviación para ampliar las frecuencias de destinos a Bogotá, Cali, Medellín y Cartagena. El Instituto de Fomento Industrial (IFI) vendió la pequeña parte que controlaba en la Comercializadora Internacional Promotora Bananera y 9,3 % que tenía en Devinorte, donde han tomado posesión las transnacionales Cargill, Masisa (madera) y Mapfre Seguros.
Todas estas acciones han deteriorado aún más el nivel de vida de los colombianos, país donde la mitad de la población se encuentra en la pobreza y no tiene posibilidad de acceder a los servicios de salud, educación y seguro social.
Organizaciones sindicales y No Gubernamentales indicaron que tres de cada cuatro personas en el campo y dos de cada cuatro en las ciudades son pobres, en un número que alcanza a 20 290 000 habitantes.
Cuando se analiza que esto ocurre en una nación cuyo Producto Interno Bruto (PIB) ha crecido como promedio más de 5 % en el último lustro, se comprende que las ganancias van a las pequeñas clases pudientes nacionales o salen del país mediante las transnacionales.
El ingreso de 10 % de la población más rica colombiana es 49 veces mayor que el de 10 % de los más pobres. A esto se suman los desplazamientos obligados de personas -realizados por el ejército en las zonas de conflicto armado- y quienes no tienen otro destino que irse hacia las ciudades para tratar de sobrevivir.
Ahora la crisis con su recesión acompañante se ha sentido con mayor fuerza en la industria, comercio, el transporte y los servicios según el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas.
Las medidas de privatización que afectan a la seguridad social están provocando grandes manifestaciones de sindicalistas y pensionados.
Las Centrales Obreras y en particular la Confederación de Pensionados de Colombia (CPC) se han lanzado a las calles en rechazo a la privatización del Instituto de Seguro Social y la liquidación de las subsidiarias Cajanal y Capre-com.
Jesús Ernesto Mendoza, presidente de la CPC, gremio que agrupa a 140 asociaciones con 1 350 000 pensionados, denunció que el Estado los ha puesto a merced de la voracidad del capital financiero, a la par que condenó las continuas detenciones de sus dirigentes como el caso de Sergio Díaz Forero, capturado por organismos de seguridad en la ciudad de Fusaga-sugá.
Con sus ansias de concluir el TLC y acabar de convencer a los cada vez menos reticentes congresistas norteamericanos, el gobierno de Uribe concretó un tratado con Washington para que ese país utilice tres bases aéreas y dos navales, en la Bahía de Málaga (Pacífico) y Cartagena (Caribe).
Aunque las conversaciones han sido secretas, se conoció que el senado del país norteño destinará 46 millones de dólares para la de Palanquero, puerto Saldar, en el río Magdalena, que ya cuenta con una pista de aterrizaje de 3 500 metros, dos enormes hangares y es la base principal de los aviones de combate colombianos. Entre las medidas se establece que ningún militar estadounidense podrá ser juzgado por delitos cometidos en suelo colombiano.
Este convenio abre las puertas a las operaciones y control militar estadounidense en la región, después de perder la base de Manta en Ecuador, la cual debió abandonar por la actitud del gobierno de Rafael Correa de no prorrogar el contrato de arrendamiento que vence en el próximo noviembre.
El senador Rafael Pardo, ex ministro de Defensa y candidato a sustituir al presidente Uribe, declaró que con este paso, “Colombia perderá soberanía y se convertirá en una base de operaciones, una especie de portaviones, contra los países vecinos”.
Ciertamente que el gobierno colombiano ha realizado enormes sacrificios para concluir el Tratado de Libre Comercio. Si los congresistas estadounidenses no lo acaban de aprobar, pasarán a la historia como unos malagradecidos.

Hedelberto López Blanch

Kennedy y Obama


Al parecer Obama no ha asimilado las lecciones del caso Kennedy o está dispuesto a degradarse hasta convertirse en otro Bush, aunque inteligente.
Kennedy cedió bastante a la reacción interna y especialmente al Complejo Industrial Militar y al “establecimiento” de los EEUU.
Con él en la presidencia esa superpotencia lanzó la invasión de Bahía de Cochino contra la naciente revolución Cubana. Igual poco después auspiciaron el golpe militar contra el gobierno democrático de Juan Bosch.
Kennedy, acompañando sin rebelarse esas acciones de fuerza, se debilitó y sus adversarios internos terminaron por asesinarlo. De todas maneras no confiaban plenamente en él.
Siempre se ha dicho que Obama corre ese mismo riesgo.
Hasta ahora el nuevo y singular presidente de los EEUU ha cedido bastante, se ha acoplado significativamente al poder tradicional y se ha debilitado, y todavía no lo han matado. Confían en que puede ceder más.
La posibilidad del magnicidio, sin embargo, no está descartada si no llega a plegarse totalmente. Obama no es del agrado de los fundamentalistas, racistas por demás, que controlan el poder económico y militar real, pero una vez presidente en no pocos casos se ha puesto a tono con ellos y le ha dado continuidad a no pocas políticas de Reagan y los Bush.
Frente al golpe militar en Honduras no solo lo dejó pasar, sino que no ha reaccionado categóricamente pese a evidenciarse la participación del Pentágono, la CIA, la Base Militar de Soto Cano y su embajador en ese país, sin dejar de lado fuertes señales de “negligencia” en su Departamento de Estado respecto a esos trajines golpistas.
En este caso ha procedido con ambigüedad, expresando primero críticas al desplazamiento de Zelaya cargadas de debilidad o arreciando después un poco el lenguaje condenatorio sin producir hechos a tono con la grave situación; inclinándose, en fin, por una absurda y mediatizada negociación re-conciliatoria con sede en Costa Rica.
En cuanto a Cuba, a Chávez, a Correa, a Evo Morales, a Daniel Ortega y el propio Zelaya se le nota una fuerte, aunque a veces contenida, hostilidad.
Por otra parte, lo relativo a la instalación de tres nuevas bases militares en Colombia y el reforzamiento de las ya existente, sumado el relanzamiento del Plan Colombia-Iniciativa Andina, más que ominoso y amenazador es premonitorio de nuevas agresiones contra nuestra América.
Eso también hace pensar que Obama no esté tan al margen como dice del golpe de Honduras, evidentemente dirigido a sentar precedentes revocatorios frente a los avances progresistas en la región: frente al ALBA y los demás esfuerzos liberadores; hace pensar, además, que el nuevo presidente estadounidense se inclina a favor de persistir en los planes de recolonización y conquista militar de áreas geoestratégicas de gran valor.
Todo eso lógicamente lo separa de las esperanzas que despertó para conquistar la presidencia.
En el orden interno, aunque tratando de avanzar en ciertas políticas sociales, se ha quedado muy corto frente a la dimensión y profundidad de la crisis capitalista.
El desgaste se siente
Su globo se desinfla
Y eso es sumamente peligroso para él, dado que cada vez más debilitado resultaría ser una presa cada vez más fácil de eliminar para los halcones y para las reales intenciones de no pocos de sus acompañantes del proceso electoral que le posibilitó la victoria y del gobierno que posteriormente conformó cediéndole terreno a lo peor de ese país.
Peligroso en dos sentidos: porque resulta más fácil un desenlace como el de Kennedy o porque por el camino de ceder se igualaría definitivamente a sus antecesores, con la desventaja que para importantes fuerzas y corrientes político-sociales que lo apoyaron esto tendría un amargo sabor a traición.
Estaría así facilitando o su muerte física o su muerte política, con serios impedimentos para su futura reelección si sobrevive al primer periodo.
En estos casos, en tiempo de crisis mayor, cuadrarse disque a la izquierda para batear por la derecha, es sencillamente fatal.
Cierto que la historia permite aprender de los errores de otros, pero también es verdad que los intereses de la clase y de gran potencia capitalista que se representan y se asumen, más allá del origen y del color de la piel, atrapan sin salida a quienes no tienen el coraje de romper con ellos, a quienes se limitan a cambios cosméticos y a transformaciones simplemente retóricas, más aun cuando la “hora de los hornos” obliga a definiciones mayores e ineludibles.
Obama cree demasiado en el rol de EEUU como superpotencia “líder” de una civilización burguesa decadente y en crisis integral.
Y en Honduras están en juego muchas cosas en cuanto al fortalecimiento o no de la maltrecha hegemonía estadounidense en nuestra América, país centro de la peor crisis sistémica del capitalismo mundial
Por eso sus ambigüedades como presidente y otras cosas peores.
Por eso la pusilanimidad evidenciada al promover el ya fracasado acuerdo de Zelaya con los golpistas a través de la mediación de Oscar Arias, presidente de Costa Rica y pupilo de ese sistema de dominación
¿Y es fácil?
Los pueblos están en otra cosa.

Narciso Isa Conde

lunes, julio 27, 2009

La situación de la clase obrera en Inglaterra de Federico Engels


En el libro de La situación de la clase obrera en Inglaterra, Engels a sus 24 años de edad hace un análisis a profundidad del tema incluyendo aspectos que siguen siendo relevantes hoy. Pese al avance en el nivel de vida de la sociedad en la Inglaterra moderna y en el resto del mundo con respecto al siglo XIX, no nos hemos librado de toda clase de afectaciones resultado del sistema depredador de hombres al que estamos sometidos. Desde el nacimiento del capitalismo inició un proceso de pérdida de medios de trabajo, con la fabricación de nuevas tecnologías cada vez más avanzadas, los pequeños productores estaban condenados al fracaso, a renunciar a la competencia contra las grandes maquinarias y sin más opciones ofrecer en el mercado lo único que le quedaba, su fuerza de trabajo, convirtiéndose así en una nueva clase.
Con la invención de las nuevas máquinas de hilar fue posible proveer mucho más hilo que antes, pronto hubo más hilo del que podían tejer los obreros existentes. “La demanda de productos textiles que, ya de por sí, estaba en aumento, se incrementó de nuevo debido a los precios más bajos de estos productos, como consecuencia de la reducción de gastos de producción por el empleo de la nueva máquina. Como resultado, hubo necesidad de emplear a más tejedores y el salario de éstos se elevó. Y, como desde entonces el tejedor podía ganar más consagrándose a su oficio, abandonó lentamente sus ocupaciones agrícolas y se dedicó enteramente a la industria textil. Así es cómo la clase de los tejedores agrícolas desapareció poco a poco completamente, fundiéndose en la nueva clase de aquellos que eran exclusivamente tejedores, que vivían únicamente de su salario, no poseían propiedad, ni siquiera la ilusión de la propiedad que confiere el arriendo de tierras. Se convirtieron por tanto en proletarios (working men).” Los avances continuaban y la migración a las ciudades aumento radicalmente.
Con la venta de su fuerza de trabajo, el obrero está enfrentándose a una nueva situación en la que no tiene la vida asegurada. Su mercancía está sometida a las leyes del mercado, como cualquier otra y por ende puede perder la cosa más preciada, su trabajo, en cualquier momento y este peligro es constante. A diferencia de un esclavo que vende su vida de una vez y para siempre asegurando a la vez su subsistencia, el obrero la vende todos los días sin tener nada seguro. Hoy como hace dos siglos, la clase obrera se enfrenta a una lucha constante por su supervivencia, a ello agregamos las bondades del capitalismo recalcitrante que entre otras cosas afecta severamente a la salud de millones de personas, fundamentalmente de las familias obreras, a consecuencia del desgaste físico y sicológico al que las somete.
Con el desarrollo de la industria, las nuevas ciudades comenzaron a transformarse. El centro principal de la industria textil, Lancashire, se trasformó totalmente. Ahí se duplicó su población en 80 años y surgieron ciudades gigantescas como Liverpool y Manchester. El desarrollo continuaba y se extendía, la industria textil experimentaba constantes innovaciones, pero no era la única, con ella se desarrollo además el “empleo de la fuerza mecánica en la industria, la demanda de máquinas, combustibles, material de transformación redobló la actividad de una multitud de obreros y de oficios. Sólo con el empleo de la máquina de vapor es que se empezó a dar importancia a los inmensos yacimientos carboníferos de Inglaterra (…) y es entonces solamente gracias a la mayor pureza de los materiales disponibles, gracias asimismo al perfeccionamiento de las herramientas, a las nuevas máquinas, y a una división más minuciosa del trabajo, que la fabricación de productos metalúrgicos devino importante en Inglaterra.”
Mientas tanto se abandonó la agricultura. Un gran número de terrenos se hallaban vacantes, y allí se instaló la nueva clase de los hacendados, arrendando la tierra, aumentaron la producción de las tierras con mejores métodos agrícolas y una explotación en escala más grande. Ahora quedarse en el campo implicaba competir con estos grandes productores de modo que los obreros no tenían más opciones que seguir emigrando hacia las ciudades que absorbían mano de obra a bocanadas. Pero todo ello llegó a un límite: junto a la explosión demográfica producto de las buenas condiciones de las que se gozó al inicio de la Revolución Industrial, la mano de obra excedió a la oferta de trabajo y los salarios cayeron, arrastrando a la miseria a masas de obreros y sus familias.
El tremendo desarrollo de las ciudades fue a costa de la constante degradación de la vida de los obreros, siendo ellos los que lo habían posibilitado. Encontrar un trabajo se convierte en una suerte, un “favor que la burguesía hace al obrero”. Sin empleo la perspectiva de morir de hambre llevaba al robo y la delincuencia y esto se convirtió en una salida para miles generando un ambiente de descomposición social. A eso sumamos las pésimas viviendas en que vivían miles de obreros y sus familias. La industria de la construcción, voraz de beneficios, omitía las medidas más básicas de construcción de viviendas adecuadas y salubres, sin ventilación, en la parte más fea de la ciudad, sin pavimentación, muchas de ellas se encontraban a orillas de desagües, en barrancos y zanjas, que representaban un peligro constante. No había un sistema de desagüe, los residuos quedaban en la superficie, muy cerca de las viviendas, creándose focos de infecciones y contaminación del ambiente; las casas de estas zonas no se salvaron del cólera.
Las epidemias se propagaban fácilmente en estas grandes ciudades. Éstas contaban con una población mayor a los 2 millones de habitantes. La mayoría hacinados, familias enteras de siete u ocho miembros vivían en un cuarto de 6 metros cuadrados. En Manchester la cifra se encontraba entre 4 mil y 5 mil hombres y mujeres en esta situación. En muchos casos la cama no era más que los harapos que traían puestos generalmente de algodón y mal adaptados para el clima. Los padres de familia contaban sólo con la ropa de trabajo y en la pieza no había si acaso algún mueble viejo, una mesa, una silla, incompletas por la necesidad de madera para ahuyentar el frío, y constantemente llenas de suciedad. “En la parroquia aristocrática de St. George, Hanover Square, vivían 1465 familias obreras; en total unas 6 mil personas, en las mismas condiciones; y allí también más de dos tercios de las familias apiñadas cada una en una sola pieza”.
En Bristol, de dos mil 800 familias de obreros el 46% no tenía más que una sola habitación. Con miles en las mismas condiciones, no era de extrañar que las epidemias se propagaran rápida y ferozmente. En estas circunstancias no es extraño que lo que queda a la mano se convierta fácilmente en un exceso, como el consumo del alcohol y el sexo.
La mala salud se convierte en un problema social a escala masiva, producto de las pésimas condiciones de existencia. Por todos lados la salud se ve afectada, por los espacios viciados y descompuestos.
Pero esto no es lo único, otro problema que afecta a la salud, es lo que tomaban como alimento. La clase obrera inglesa cobraba los sábados por la tarde, eso significaba que la compra de comida se realizaba por la tarde cuando la clase media ya había arrasado con los mejores productos, por lo que no tenían oportunidad de escoger lo que compraban, además de que generalmente no podían adquirir mejores productos por su elevado costo. De tal forma que lo que consumían era de lo peor en el mercado: vegetales y lácteos en descomposición; estos productos no podían consumirse más allá del siguiente día. Los pequeños comerciantes se aprovechaban de la falta de alternativas para estos obreros, vendiendo productos adulterados, de bajísima calidad y reduciendo las cantidades por el mismo precio. Según informes del Manchester Guardian se vendía mantequilla salada por mantequilla fresca, ya sea cubriéndola con una capa de esta última, ya sea colocando una libra de mantequilla fresca en el mostrador para que el cliente la pruebe. Se mezclaba arroz pulverizado con el azúcar u otros artículos baratos y se vendía a mayor precio, hasta se llegaba a mezclar el café en grano, dándole a la mezcla la forma de granos de café, el cacao se mezclaba con tierra, etc.
La dieta era muy básica, casi sin incluir carne, lo cual se reflejaba en enfermedades que eran cotidianas entre los niños, jóvenes y adultos, como las escrófulas o el raquitismo (enfermedad inglesa, excrecencias nudosas que aparecen en las articulaciones) “…muy extendido asimismo entre los niños de los trabajadores. La osificación es retardada, todo el desarrollo del esqueleto retrasado, y además de las afecciones raquíticas habituales, se comprueba con bastante frecuencia la deformación de las piernas y la escoliosis de la columna vertebral.” Todo ello además de la tisis o el tifus, productos de la mala ventilación, la humedad y el desaseo. En 1837 el tifus atacó aun más agresivamente, el 16.5 por ciento de los enfermos murió. Con cada nueva crisis una epidemia de enfermedades aparecía, esta furia del tifus en 1837 fue un juego de niños como lo escribe Engels comparada con la que siguió a la crisis de 1842. La sexta parte del número total de pobres en toda Escocia fue víctima de esa fiebre.
Los obreros no tienen posibilidad de acudir a un medico, el costo es demasiado elevado y las alternativas que se le ofrecen son generalmente charlatanería que habitualmente resultaban nocivos. “Los obreros ingleses toman ahora sus medicinas patentadas, perjudicándose ellos mismos mientras que los fabricantes se benefician con su dinero. Entre esos remedios, uno de los más peligrosos es un brebaje a base de opiados, en particular de láudano, vendido bajo el nombre de "Cordial de Godfrey". Algunas mujeres que trabajan a domicilio, que cuidan sus niños o los de otras personas, les administran ese brebaje para mantenerlos tranquilos y fortificados, al menos muchos así lo piensan. Desde el nacimiento de los niños, ellas comienzan a usar esos remedios, sin conocer los efectos de ese "fortificante" hasta que los niños mueren debido al mismo. Mientras más se acostumbra el organismo a los efectos del opio, más se aumenta las cantidades administradas. Cuando ya el "Cordial" no hace efecto, también se da algunas veces láudano puro, de 15 a 20 gotas de una vez. (…) [los niños] se vuelven pálidos, apagados, débiles y la mayoría mueren antes de cumplir dos años de edad”. Los medicamentos patentados, como pudimos ver con la influenza en México, sólo beneficia a la burguesía que especula con nuestra salud.
En tiempo de crisis las cosas son todavía peor: “cada crisis barrería sin duda a parte de la población "excedente" que moriría de hambre. Pero como el período más grande de la depresión económica es a pesar de todo muy breve -un año, a lo sumo 2 años ó 2 años y medio-, la mayoría de ellos salva el pellejo a costa de graves privaciones.” Cada crisis provoca una multitud de víctimas, debido a enfermedades.
Incluso la salida que puede encontrar como distracción a su miseria y la falta de educación, daña la salud de los obreros. El consumo excesivo del alcohol hace de su cuerpo debilitado una presa de toda clase de enfermedades y avería su sistema inmunológico. Y la propagación de enfermedades es favorecida por la aglomeración de las tabernas.
En 1839-1840 “Según el informe del registrador general G. Graham, la mortalidad anual en toda Inglaterra y el país de Gales es ligeramente inferior al 21/4 por ciento, es decir, que anualmente muere un hombre de cada 45”. En Manchester moría uno de cada 30, sin embargo “…en Prescott, habitado por mineros del carbón y que, puesto que el trabajo de las minas está lejos de ser sano, se sitúa muy por debajo de las zonas rurales por lo que toca a la higiene. Pero los obreros residen en el campo y la mortalidad se cifra en 1 por 47.54”. Lo cual significa que la afectación más grave de salud se producía entre los obreros de la ciudad, debido a todas las condiciones de vida antes descritas.
Como queda claro, la situación de la clase obrera inglesa era deplorable. Increíblemente a dos siglos la historia sigue siendo así en muchos sitios de África, América Latina y Asia. Las epidemias son un absurdo en pleno siglo XXI, en la era de las computadoras y el micro chips, cuando se habla de la creación de inteligencia artificial. A lado de esos desarrollos suena increíble que la salud de millones de hombres siga siendo mermada debido a falta de condiciones adecuadas para vivir y trabajar.
Pero esa es solamente la situación en la vida cotidiana de las ciudades y fuera de las fábricas. Lo peor aún no se ha dicho, miles de obreros fabriles se ven obligado a trabajar en condiciones inhumanas con la presión moral de ser despedido en cualquier momento, por quedarse dormidos, por no ir al ritmo de las inagotables máquinas, por no aceptar y rendir las más de 12 horas de trabajo, en las que comúnmente se pasan nueve de esas horas sin parar un solo momento. Todo lo relatado por Engels en este libro es aterrador. La situación de los niños, hijos de obreros, engendros de la mala condición física de su madre, habitualmente también trabajadora, y condenado desde antes de su nacimiento a una existencia precaria es traído al mundo débil, expuesto a cualquier enfermedad e incluso ya enfermo. Aún así se ve obligado a trabajar desde muy pequeño para ayudar al sustento de la familia. Los niños son privados del aire fresco, del juego que le permitirá fortalecer sus músculos, y la convivencia que le ayudara a un desarrollo integral. Nada de eso existe para un niño obrero, en cambio se presenta ante él el ambiente viciado y asfixiante de la fábrica, que lo explota por largas jornadas, lo mismo es para el resto de su familia.
Los obreros y obreras, ya sean adultos o niños, ven seriamente afectada su saludo debido a las condiciones de trabajo en la fábrica. Las largas horas de trabajo de pie deforma su columna vertebral, las caderas y las piernas; en los trabajos de afilado de cuchillos, las minas, etcétera. Las partículas metálicas cortantes se introducen en los pulmones para asegurar una muerte prematura: estos trabajadores no viven más de 35 o 45 años. Las mujeres y los niños de la costura y confección, sufren deformaciones en columna y manos, la vista de ve afectada al grado de la ceguera y la tuberculosis es casi inevitable. Se genera un agotamiento considerable de toda la energía física y por ende todo género de males. El ambiente en las fábricas es generalmente caluroso y húmedo, por lo que los obreros llevan poca ropa puesta, sin embargo, al cambio de temperatura al salir, o al entrar una ráfaga de viento fresco causaba resfriados que fácilmente podían complicarse. Los obreros ingleses se veían seriamente afectados por las enfermedades crónicas, de modo que ante una enfermedad ya presente el ambiente de la fábrica y estos cambios de temperatura traen mayores complicaciones.
El ambiente depresivo y el constante estrés también juegan si papel en el debilitamiento del sistema inmunológico, de modo que los obreros ingleses del siglo XVIII tienen una vida raquítica repleta de enfermedades constantes y crónicas, todo ello para asegurarse sólo el sustento mínimo necesario para la vuelta al trabajo al día siguiente. De este modo miles de obreros son absorbidos por el capitalismo para arrojar ganancias a la burguesía. La burguesía no está dispuesta a comprar asientos, a brindar servicio médico, ni a elevar los salarios o mejorar las condiciones de la fábrica: esto se traduciría en menores ganancias para ella. Los obreros ya que ya no pueden dar más de sí son simplemente reemplazados por algunos de esos miles sin empleo. De modo que antes de conservar la mano de obra acuden a su reemplazo.
En este 2009, ante esta crisis económica, las condiciones de trabajo se precarizan cada día más. En cada crisis económica los niveles de vida se desploman, la vida en la fábrica se hace más sombría afectando severamente la salud y el ánimo de los obreros, no podría ser de otro modo. Es gracias a esto que el capitalismo se mantiene en pie y en esta etapa de imperialismo la situación sólo se a extendido fuera de Inglaterra más no a desaparecido y no lo hará hasta que se resuelva la contradicción entre los millones de pobres, productores de riquezas “ajenas”, y la burguesía que basas sus beneficios en la explotación de la clase trabajadora. Por consecuencia los problemas de salud no hallarán soluciones reales sin que se cambie radicalmente de raíz esta sociedad eliminado la propiedad privada capitalista. La revolución hoy más que nunca es posible y necesaria. ¡Socialismo o barbarie!

Carla Torres